De nuevo es nuestra amiga Lina quien colabora con nosotros y nos sorprende con esta rica receta. A Lina le disgusta mucho que utilicemos palabras inglesas para denominar a nuestros dulces y postres. Aduce nuestra amiga Lina, y no sin razón, que nuestro vocabulario es muy rico y extenso y no tenemos por que utilizar palabras extranjeras, como por ejemplo, llamar cupcake a una magdalena. Dicen, que la palabra cupcake significa algo así como bizcocho en taza, porque era en pequeñas tazas como solían hacerlo antiguamente las mujeres, de ahí supuestamente viene su nombre. También dicen que es por la forma de medir los ingredientes, en tazas. Sea como fuere, como estos no están hecho de esa forma, sino que hemos utilizado para elaborarlos unos moldes de magdalenas, los de toda la vida, pues su nombre debería ser magdalenas decoradas. Por supuesto respetamos todas las opiniones, a favor o en contra, no somo nosotras precisamente expertas en esta materia. Pero como a Lina no le gusta llamarlo