Tarta mousse de fresas

Llega la primavera y con ella llega la temporada de fresas, una de mis frutas preferidas.
Son tantas las recetas que se pueden elaborar partiendo de esta exquisita fruta que seria imposible de enumerar ya que vale tanto para recetas dulces como para saladas.
Esta vez me decidí por una tarta tipo mousse, una tarta fresquita, de las que no necesitan horno y con la que triunfaras seguro.
Es una de esas tartas que vienen ideal para tomar como postre... un bocado dulce y sabroso con el que poner el punto final a una buena comida!!!
La Fragaria, más conocida como fresa o frutilla, es sin duda alguna la reina de las bayas. 
Pertenece al género de plantas rastrera estoloniferas de la familia Rosaceae y son cultivadas por su fruto comestible.
Su fruto lo podemos conseguir durante los meses de primavera y verano y entre sus particularidades mas importante destaca el efecto refrescante que posee además de sus muchas propiedades y beneficios para la salud.
Destacan por su alto valor nutritivo y por su increíble riqueza en vitaminas entre las que se encuentran la vitamina B1, B2, B3, B6, B9, vitamina E y vitamina C.
Son bajas en calorías y posees un alto contenido de agua, casi un 80%,  por lo tanto es ideal en dietas de adelgazamiento y para depurar el organismo.
Contribuye a disminuir el nivel de colesterol en sangre, combate el estreñimiento, regula el nivel de azúcar, es útil para prevenir la gota y es consideradas como un antiinflamatorio natural.
Como ves todo son beneficios  a la hora de tomar esta rica y apetitosa fruta... así que... a disfrutarla que estamos de temporada!!!

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Ingredientes:

Para la base:

• 1 paquete de galletas tipo María (sin gluten ni lactosa para intolerantes)
• 50 gramos de azúcar
• 75/80 gramos de mantequilla (sin lactosa para intolerantes)

Para la mousse:

• 400 gramos de fresas
• 3 huevos (solo claras)
• 125 gramos de azúcar (algo más si sois muy golosos)
• 200 ml de nata (sin lactosa para intolerantes)
• 6 hojas de gelatina neutra
• 1 pizca de sal

Elaboración a modo tradicional

Lo primero será elaborar la base de galletas como tengáis costumbre:

Yo trituro las galletas unos segundos en el robot de cocina hasta que estén medio trituradas. 

Luego pongo algo de azúcar y la mantequilla que debe estar tierna, a temperatura ambiente, pero no suelo derretir.

Vuelvo a triturar todo hasta conseguir una mezcla homogénea.

Forramos un molde desmontable y ponemos papel sulfurizado en su base y los laterales.

Vertemos la mezcla de galletas en el molde, esparcimos y aplastamos con ayuda de la base de un vaso.

Vamos ahora con la mousse:

Trituramos las fresas con la batidora o un robot de cocina hasta conseguir un puré fino. 

Ponemos en un cazo al fuego junto con el azúcar y llevamos a ebullición durante unos minutos (pocos) hasta que se deshaga el azúcar. (foto 1º)

Ponemos mientras las hojas de gelatina en un bol con agua a hidratar. (foto 2º)

Añadimos la gelatina, una vez esté hidratada, en el cazo. Mezclamos hasta que se disuelva y retiramos del fuego. (foto 3º)

Ponemos las claras con una pizca de sal en un bol y montamos a punto de nieve. (foto 4º)

OJO: Aconsejo que los huevos sean de total confianza, porque van crudos, o usar claras pasteurizadas.

Agregamos las claras al recipiente que contiene las fresas y mezclamos con suave movimiento envolvente hasta mezclar todo. Solo utilizar una paleta de silicona o un batidor de varillas, nada de batidora. (fotos 5º y 6º)

Montamos también la nata como tengamos costumbre, ya sabéis que para que monte bien tiene que estar la nata y el recipiente bien fríos. (foto 7)

Añadimos al recipiente y volvemos a mezclar todo con suave movimiento envolvente hasta conseguir una mezcla homogénea. Solo utilizar una paleta de silicona o un batidor de varillas, nada de batidora.(fotos 8º y 9º)

Vertemos la mezcla en el molde que teníamos preparado y damos unos golpecitos para asentar bien. (foto 10º)

Llevamos al frigorífico durante unas horas. Mejor de un día para otro, pero si la vas a utilizar pronto aconsejo entonces poner un rato en el congelador.

Ya tenemos lista nuestra deliciosa tarta mousse de fresas... la decoración a gusto de cada cual!!!

Elaboración en Thermomix:

Para la base de galletas:

Ponemos las galletas en el vaso y trituramos  6 segundos  /velocidad 5

Añadimos la mantequilla y el azúcar y volvemos a triturar otros 6 segundos  / velocidad 4

Vertemos la mezcla de galletas en el molde que vayamos a utilizar, esparcimos y aplastamos con ayuda de la base de un vaso o del cubilete. Reservamos.

Para la mousse de fresas:

Ponemos las hojas de gelatina en un bol con agua a hidratar.

Ponemos las fresas en el vaso y trituramos 10 segundos /velocidad 5. Tiene que quedar una mezcla bien batida, homogénea, si necesitais algo mas de tiempo lo poneis.

Agregamos el azúcar y ponemos 7 minutos /100 º / velocidad 1 o 2 para que quede una especie de mermelada o crema.

En el último minuto añadimos las láminas de gelatina hidratadas por el bocal.

Sacamos la mezcla a un bol y dejamos enfriar.

Montamos a punto de nieve las claras:

Ponemos las claras en el vaso con una pizca de sal. Ponemos la mariposa en las cuchillas y batimos de 2 a 4 minutos /velocidad 3 y 1/2. Sacamos a otro bol y reservamos también.

OJO: Aconsejo que los huevos sean de total confianza, porque van crudos, o usar claras pasteurizadas.

Montamos la nata como tengamos costumbre: 

Ponemos la nata en el vaso bien fría, con mariposa, y batir en velocidad 3 al principio y luego subo 3 y 1/2. No programar tiempo, estad pendientes para que no se pase y se haga mantequilla.

Agregamos ahora las claras al recipiente que contiene las fresas que ya estarán frías. 

Mezclamos con suave movimiento envolvente hasta mezclar todo. Solo utilizar una paleta de silicona o un batidor de varillas, nada de batidora. (fotos 5º y 6º)

Una vez estén integradas las claras añadimos la nata al recipiente.

Volvemos a mezclar todo, con suave movimiento envolvente, hasta conseguir una mezcla homogénea. Solo utilizar una paleta de silicona o un batidor de varillas, nada de batidora.(fotos 8º y 9º)

Vertemos la mezcla en el molde que teníamos preparado y damos unos golpecitos para asentar bien. 

Llevamos al frigorífico durante unas horas. Mejor de un día para otro, pero si la vas a utilizar pronto aconsejo entonces poner un rato en el congelador.

Aquí podéis ver el corte de la tarta, que sé que os gusta verlo... una textura suave y deliciosa!!!

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