Naranjas con canela y licor

Hace dias llegó a mi madre, toda ilusionada, con unas naranjas enormes y dulces, de las de comer.
Eran para que hiciese el postre que ella hacía en invierno, en plena temporada de naranjas, y para ocasiones más o menos especiales.
Como le hace mucha ilusión, ya sabéis como son las madres, está super ilusionada con esto del blog, pues voy a darle esa satisfacción y que la vea publicada.
Mi pueblo es rico en huertas de limones y naranjas. Antiguamente en los pueblos pequeños como era el mío, no había tantas frutas, sólo teníamos la fruta propia de la temporada, la que comprabamos al vecino de al lado de su propia cosecha. Eso sí, una fruta con un sabor y un dulzor especial muy diferentes a los de ahora... cuantos recuerdos y añoranzas!!!
Así que, dependiendo de la época, teníamos ricos nísperos, melocotones, albaricoques, uvas, higos, chirimollas, granadas y por supuesto naranjas.
Pasábamos el invierno tirados en las calles jugando y nadie se constipaba porque tomábamos naranjas por un tubo y con ello todo un aporte de vitamina C.
Así que si queréis probar este rico postre, lleno de vitaminas, os invito con gusto. 
Los ingredientes son simples y económicos... y su elaboración muy  fácil.!!!

Ingredientes:

• Unas naranjas dulces, de las de comer.
• Un poco de azúcar
• Un poco de canela
• Un poco de licor a gusto (usé uno de naranja, pero también le viene bien el anís)

Elaboración:

Pelamos la naranja, la dejamos desprovista de la piel y de la parte blanca de dentro.

Las cortamos en rodajas ni gordas, ni finas.

Ponemos en una fuente y le agregamos un chorrito pequeño del licor deseado, mi madre solía usar Licor 43, yo puse un licor de naranjas, aunque también puedes poner algun tipo de anís dulce. 

Espolvoreamos con azúcar a gusto y un poco de canela, pero podéis sustituir la canela por azúcar vainillada si os gusta más.

Recordad, si vais a dar a los niños no pongáis mucho licor o sustituirlo por un licor sin alcohol.