Suelo prepararla mucho en casa y aunque se le puede poner otra guarnición, la verdad es que con patatas es como más nos gusta a todos.
Cuando hago esta receta no puedo evitar acordarme de mi madre, de esos pollos que criábamos en el patio entre todos, y de como, una vez criados, llorábamos porque no queríamos que los matara.
Eran pollos enormes, de casi cinco kilos, más que pollos parecían pavos. Tardaban meses en criarse y estaban criados con los retos de la comida que quedaba en casa; con restos de verduras, con maíz o con "afrecho" (que era algo así como la cáscara del trigo), criados libres en el patio... bien gordos y sanos!!!
¡¡¡Comos recuerdo el sabor de ese pollo al ajillo que mi madre solía preparaba en Navidad como cena especial!!
Ya os dije alguna vez que eramos "niños pobres" y no había ricas viandas en la mesa, pero siempre había alegría alrededor y pollo... y menudos pollos!!!
Los sabores ya no son los mismos, a pesar de tener la misma receta heredada de mi madre, pero eso es normal, la materia prima nunca sera la misma.
De todos modos, os paso la recetilla para que la preparéis en casa; os dejo las dos versiones, la tradicional y elaborada en Robochef, mi magnifico robot de cocina que tanto me agiliza la tarea... mi olla "magica", como dice mi madre!!!
Ingredientes:
- 1 pollo troceado
- 1 cabeza de ajos
- 1 o 2 hojas de laurel
- 1 poco de pimienta negra
- 1 vaso de vino blanco
- Aceite de oliva virgen extra
- Algo de sal
- Patatas para guarnición
Elaboración a modo tradicional:
La elaboración de esta receta es muy sencilla, pero los resultados son satisfactorios. Es mejor comprar el pollo ya troceado.
Lavamos bien el pollo, quitamos los restos de "pelusillas" que pueda tener y escurrimos.
Le ponemos un poco de sal, a gusto, y algo de pimienta... o sea, salpimentamos el pollo.
En una cazuela ponemos un fondo de buen aceite de oliva virgen extra, el sabor del aceite es primordial en esta receta. Añadimos los ajos y el laurel, para que el aceite tome sabor, freímos un poco.
Añadimos ahora el pollo troceado y salpimentado. Doramos un poco, vamos dando vueltas.
Agregamos ahora el vino blanco y dejamos cocer a fuego suave removiendo, con cuidado, de vez en cuando.
Mientras termina de cocer el pollo pelamos unas patatas, las troceamos y freímos en abundante aceite caliente. Apartamos en una fuente con papel absorbente debajo, para quitar el exceso de aceite y reservamos.
Una vez esté listo el pollo lo ponemos en la fuente sobre el lecho de patatas. En este caso y a modo de decoración lo puse en una sarten pequeña, de estas antiguas, que usaba mi madre.
Tomamos recién elaborado el plato, caliente, pero si queréis lo dejáis para mañana, igual toma más sabor... pero, eso si, las patatas siempre recién fritas!!!
Mirad como sale el humillo en esta foto... estaba recién apartado!!!
Elaboración en Robochef:
La elaboración en esta olla "mágica" es casi la misma, sólo cambia el tiempo de cocinado.
Lavamos bien el pollo, quitamos los restos de "pelusillas" que pueda tener y escurrimos.
Le ponemos un poco de sal, a gusto, y algo de pimienta... o sea, salpimentamos el pollo.
En la cubeta de la olla ponemos un fondo de buen aceite de oliva virgen extra, el sabor del aceite es primordial en esta receta.
Añadimos los ajos y el laurel, para que el aceite tome sabor, freímos un poco. Programamos menú SOFREÍR-FREÍR / 8 MINUTOS / 180º
Añadimos ahora el pollo troceado y salpimentado. Doramos un poco, vamos dando vueltas.
Cancelamos esta función y agregamos ahora el vino blanco y un poco de agua, poca. Programamos de nuevo, esta vez menú PRESION / 3 MINUTOS / 135º.
Mientras termina de hacerse el pollo pelamos unas patatas, las troceamos y freímos en abundante aceite caliente. Apartamos en una fuente con papel absorbente debajo, para quitar el exceso de aceite y reservamos.
Una vez esté terminada la función, le damos a CANCELAR y abrimos la olla.
Sacamos el pollo y lo ponemos en la fuente sobre el lecho de patatas. En este caso y a modo de decoración lo puse en una sarten pequeña, de estas antiguas, que usaba mi madre.
La elaboración de esta receta es muy sencilla, pero los resultados son satisfactorios. Es mejor comprar el pollo ya troceado.
Lavamos bien el pollo, quitamos los restos de "pelusillas" que pueda tener y escurrimos.
Le ponemos un poco de sal, a gusto, y algo de pimienta... o sea, salpimentamos el pollo.
Desgranamos la cabeza de ajos y "machacamos" un poco, con ayuda del mango de un cuchillo o una maza de mortero o almirez.
Añadimos ahora el pollo troceado y salpimentado. Doramos un poco, vamos dando vueltas.
Agregamos ahora el vino blanco y dejamos cocer a fuego suave removiendo, con cuidado, de vez en cuando.
Mientras termina de cocer el pollo pelamos unas patatas, las troceamos y freímos en abundante aceite caliente. Apartamos en una fuente con papel absorbente debajo, para quitar el exceso de aceite y reservamos.
Una vez esté listo el pollo lo ponemos en la fuente sobre el lecho de patatas. En este caso y a modo de decoración lo puse en una sarten pequeña, de estas antiguas, que usaba mi madre.
Tomamos recién elaborado el plato, caliente, pero si queréis lo dejáis para mañana, igual toma más sabor... pero, eso si, las patatas siempre recién fritas!!!
Mirad como sale el humillo en esta foto... estaba recién apartado!!!
Elaboración en Robochef:
La elaboración en esta olla "mágica" es casi la misma, sólo cambia el tiempo de cocinado.
Lavamos bien el pollo, quitamos los restos de "pelusillas" que pueda tener y escurrimos.
Le ponemos un poco de sal, a gusto, y algo de pimienta... o sea, salpimentamos el pollo.
Desgranamos la cabeza de ajos y "machacamos" un poco, con ayuda del mango de un cuchillo o una maza de mortero o almirez.
Añadimos los ajos y el laurel, para que el aceite tome sabor, freímos un poco. Programamos menú SOFREÍR-FREÍR / 8 MINUTOS / 180º
Añadimos ahora el pollo troceado y salpimentado. Doramos un poco, vamos dando vueltas.
Cancelamos esta función y agregamos ahora el vino blanco y un poco de agua, poca. Programamos de nuevo, esta vez menú PRESION / 3 MINUTOS / 135º.
Mientras termina de hacerse el pollo pelamos unas patatas, las troceamos y freímos en abundante aceite caliente. Apartamos en una fuente con papel absorbente debajo, para quitar el exceso de aceite y reservamos.
Una vez esté terminada la función, le damos a CANCELAR y abrimos la olla.
Sacamos el pollo y lo ponemos en la fuente sobre el lecho de patatas. En este caso y a modo de decoración lo puse en una sarten pequeña, de estas antiguas, que usaba mi madre.
Adoro frango e achei esta receita uma maravilha
ResponderEliminarbjs
el pollo asi preparado me encanta!!! es una autentica maravilla!!!
ResponderEliminarQué rico! Y tengo la suerte de disfrutar de pollos caseros así que mejor que mejor. Besiños.
ResponderEliminarPollo, conejo... claro que la he comido millones de veces, pero no siempre como deberias, a veces promete y no sabe a nada, seguro que la tuya es una delicia!!
ResponderEliminarMe encanta este plato que es de toda la vida, pero con un sabor espectacular, enhorabuena, sigue así, un beso.
ResponderEliminarLAS DELICIAS DE MAYTE
Que rica receta de siempre! Un beso!!!
ResponderEliminarPlato completito, y que olorcillo mas bueno !!!!!
ResponderEliminarBesitos.
Es una receta socorrida, y desde luego, deliciosa. De toda la vida! Y en mi casa, tradicional, se puede hacer con thermomix pero no me apaño y acabo haciendo puré de pollo xD
ResponderEliminarYo tampoco me olvido de estos platos y de vez en cuando los pongo, aquí nadie se me queja y es que lo tradicional suele ganar por mayoría. Muchos besos.
ResponderEliminarMe encanta la cocina tradicional como este pollo tan rico y sencillo. Las fotos son muy boninas. Un besote.
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